Decenas de personas engrosaron las manifestaciones; maestros, transportistas, fabriles, comerciantes, estudiantes universitarios y población en general salieron a las calles y hasta llegada la noche continuaban protestando y rechazando el incremento en el precio de la gasolina y diésel, que subió entre el 73 y 83%.
En La Paz y El Alto, la movilización fue ruidosa y violenta. En horas de la mañana y hasta el mediodía los alteños que se apostaron en inmediaciones del Peaje de la Autopista La Paz-El Alto quemaron las casetas y oficinas de Vías Bolivia, además de una vagoneta particular. Los uniformados tuvieron que hacer uso de agentes químicos para dispersar a la turba.
Luego la movilización se trasladó a la ciudad sede de Gobierno, donde las juntas vecinales y trabajadores descontentos marcharon por el centro paceño llegando a rodear la Plaza Murillo, donde hubo enfrentamientos con los efectivos policiales y destrozos en el edificio de la Vicepresidencia y la Gobernación. Los descontentos con sus gritos pidieron la dimisión del presidente Evo Morales. Como resultado de las movilizaciones en esta capital un oficial de la Policía resultó herido y un número indeterminado de personas arrestadas.
En tanto que en la ciudad de Cochabamba el Comité Cívico y trabajadores de diferentes sectores marcharon por diferentes arterias de esa ciudad llegando hasta inmediaciones de la Plaza 14 de Septiembre para expresar su descontento, sin embargo los efectivos policiales apostados en las inmediaciones tuvieron que gasificar a los marchistas para dispersarlos. La movilización culminó con el saqueo de algunos centros de abasto.
De la misma manera en la ciudad de Santa Cruz, se protagonizó una ruidosa movilización protagonizada por estudiantes universitarios, trabajadores en salud y maestros que gritaron a voz en cuello su rechazo a la medida lanzada el domingo por el Gobierno de Evo Morales. Asimismo, amenazaron con el bloqueo de carreteras.
En Oruro, los protagonistas de la movilización fueron los trabajadores mineros que a dinamitazos hicieron escuchar su rechazo al alza en el precio de los carburantes y demandaron la abrogatoria de la misma al considerarla de antipopular y como un atentado para el bolsillo de los más pobres.
En la ciudad de Sucre los sectores sociales protagonizaron una ruidosa marcha de protesta pidiendo la derogatoria del Decreto Supremo Nº 748 y el pago de salarios justos. Los manifestantes advirtieron en saquear los centros comerciales y de abasto por considerar que la subida de los pasajes y productos subió por encima del 150 %.
En Potosí los maestros y trabajadores en Salud tomaron las calles de esa capital para rechazar el incremento del 20 % que decretó el gobierno de Evo Morales. Asimismo demandaron que el Decreto Supremo Nº 748 sea abrogado.
En Tarija los transportistas fueron los protagonistas tras cumplir con el paro de 24 horas que dispuso la Confederación de Choferes de Bolivia, en rechazo al "gasolinazo". La movilización en esta capital fue minimizada por el ministro de la Presidencia Óscar Coca.
En tanto en Cobija (Pando) Guayaramerín (Beni) se realizaron marchas en rechazó el "gasolinazo". En Trinidad, según el reporte de radio Patujú, la ciudad permaneció paralizado por el paro cívico convocado por entidades cívicas.
El común denominador en todas las movilizaciones fue pedir la renuncia del presidente Evo Morales, por su negativa a abrogar el decreto que instruye la elevación en el precio de los carburantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario