El Ombudsman como vigía de
los Derechos Humanos
Mauricio Aira
Nació para dar valía al ciudadano común ante el
mastodóntico poder monárquico del pasado. Sus antecedentes figuran en Atenas,
Esparta, en China, en Roma y hasta con Al Mazalin musulmán, lo cierto es que en
Suecia surge para poner fin a la pugna entre el Parlamento y el Rey. Sucedió en
1809 que figura en la Nueva Constitución para vigilar que jueces cumplan las
leyes. Idea central “garantizar los derechos civiles por un representante del
pueblo” independiente del Gobierno.
Se trató de estructurar un control fiscalizador entre
los administradores de la Justicia. Un control que no dependiera del Ejecutivo
y que contara con la confianza del Legislativo en una vigente separación de poderes
y que unos y otros respetasen a los ciudadanos. Corrían tiempos del
liberalismo, aunque al menos 3 clásicos principios eran comunes: 1) Soberanía de la Nación, 2) elección de sus delegados y 3)
instauración de la responsabilidad del Ejecutivo ante la Asamblea de Delegados.
J.l.Majorano (Primer Ombudsman Argentino) llama a esta
instancia “las huellas dactilares” que identifican al Ombudsman, o sea el
nacimiento para el derecho público y para los demás sistemas políticos y
constitucionales de una figura de rasgos peculiares, que sin embargo sólo se
mantuvo en los países Escandinavos sin ser conocida en el resto del mundo
durante mucho tiempo.
De Suecia pasó a Finlandia en 1919 cuando desaparecida
la dominación rusa la consagró en su CPE como “ombudsman del parlamento” copiado
del modelo sueco y con amplias facultades para supervisar las leyes en las
actuaciones de los Tribunales. 34 anos tardó Dinamarca cuando su CPE de 1955 la
incorpora en su sistema jurídico, aunque con diferencias por seguir el corte
napoleónico. Noruega y Nueva Zelandia en 1962 adoptaron “El Defensor del
Pueblo”.
Alemania 12 anos después de terminada la Segunda
Guerra, adoptó la figura poniendo énfasis en sus FFAA. Una década más tarde es
Inglaterra que asume la Institución aplicándola por regiones, Irlanda del
Norte, Canadá, lo que imitó EEUU en sus Estados federados. Australia establece
el Ombudsman en 1971 y le llama “El Comisario Parlamentario”. Francia la asume
en 1972.
Latinoamérica ha venido incorporando la Institución
del Defensor del Pueblo en sus constituciones en los últimos 25 anos
conservando la figura inicial del modelo sueco en un rango institucional como
órgano autónomo de la mayor jerarquía y luego en la defensa de los derechos
comprendidos como garantías de las libertades y derechos fundamentales y para
velar por el respeto de tales garantías. Los informes serán rendidos
directamente al Parlamento. Ya no es mas “la magistratura de la persuasión”
sino cuenta con el recurso de amparo y de inconstitucionalidad, ambas
prerrogativas incorporadas en sus CPE.
Por todo lo que antecede, es por demás lamentable que
con la elección reciente de un nuevo Defensor en Bolivia, se pretenda
distorsionar todo el historial y la tradición de esta figura, para convertirle
en defensor del Estado y que abandone su misión crítica de supervisión de las
instituciones estatales en menosprecio de su sagrada misión de velar por la
vigencia de los DDHH y ser cautelar de los bienes y servicios ante los
Administradores del Estado.
El Defensor del Pueblo existe para edificar una
cultura de respeto a los derechos humanos, en informar a la sociedad respecto
al orden jurídico y fortalecer una conciencia de respeto reciproco entre
quienes la integren. Hombre rebelde cuya causa debe ser la lucha contra la
corrupción, vigilar la conducta de los servidores públicos, asumir la
responsabilidad de investigar a la Administración identificándose como un
“verdadero soldado de la Democracia”. (Jorge Luis Majorano)