GOBIERNO OLVIDA CONTRIBUCION DE JUBILADOS
Hugo
Bilbao La Vieja A.
Una sociedad-un gobierno-que solo piensa que la generación actual de
trabajadores, públicos o privados, es la única merecedora al reconocimiento
nacional por el solo hecho de su ejercicio contemporáneo, olvidan, deliberada o
conscientemente, la invalorable contribución de hombres y mujeres que en el
próximo pasado entregaron al país lo mejor de su esfuerzo y capacidad, su vida
integra, quizás con mayor significación, generosidad y sacrificio, no puede
menos que calificarse como una conducta gubernamental vejatoria, inequitativa,
desleal e ingrata, sobre todo carente del mejor atributo que se puede esperar
de un gobierno: Justicia distributiva en lo económico conciencial y moral de
los pueblos respetuosos a la venerable gente mayor, mal grado de su verdadera
dimensión social y humana tantas veces ignorada por la sociedad y el avieso mal
agradecimiento de los detentadores del poder.
Lo del doble
aguinaldo es una muestra palmaria del no importismo a los viejos luchadores
patrios y es una demostración clara para entender que al gobierno realmente no
le interesa la gente de la tercera edad, aunque siempre se sirve de ella
reclamando su voto con ilusorias promesas electorales incumplidas, dice por
ello que solo los que producen tienen derecho a gozar de las liberalidades de
la actual bonanza económica hidrocarburífera como si todos aquellos antiguos servidores
no hubiesen dado nada de nada al país.
Dicen también que los jubilados tienen la RENTA DIGNIDAD (Bs. 200) y que
con ello estarían compensados económicamente en relación con el doble
aguinaldo, falacia mayúscula e injusta, pues a los jubilados actualmente se los
estaría considerando simple y llanamente como parásitos de la sociedad en la
que todavía existen, sin considerar que en su juventud y madurez dieron todo
cuanto de bolivianismo atesoran hasta hoy.
Los jubilados
(Viejos servidores por antonomasia)sufren mayores calamidades en su salud,
alimentación, impuestos, etc junto a sus familias, sus magros ingresos como
“rentistas”, palabra exaltada como argumento para negarles el segundo
aguinaldo, no les alcanza en verdad para vivir sino para no morir, toda vez que
en Bolivia, como todos saben la jubilación jamás es un premio a la ofrenda
vitalicia de quienes han trabajado por la patria con dignidad, honradez y esfuerzo permanente, sino un castigo que
jamás llega al 100 % de su antiguo
salario activo porque además conlleva la mezquina prescindencia de que los
viejos trabajadores existen todavía en el planeta debido a la ostensible
marginalidad de los intereses de quienes creen ostentar el exclusivo derecho de
borrarlos y/o excluirlos de los beneficios
que en una democracia real debieran ser universales para ser realmente justos,
pues como reza aquel clamoroso mandato bíblico : “Solo se posee bien aquello
que se comparte”.
Justicia es dar lo
que por derecho pertenece al que más necesita y los jubilados transitan
precisamente ese camino…..
El
autor es Abogado