El Diario La Patria publica su testimonio sobre los atroces asesinatos cometidos por originarios vecinos de la mina Santa María, respetando íntegramente su texto y la patética imagen de una de las víctimas de un nuevo hecho criminoso que lacera el alma boliviana y deja un sabor a impotencia total, porque al parecer, nada puede detener la vorágine desatada a lo largo de todo el país "sin temor de Dios ni de la Ley", y que llama la atención de los organismos humanitarios, de la Iglesia, de la Unión Europea y otros espectadores que ven incrédulos un renacer de la más salvaje barbarie. El texto de LP que lo encontramos en el portal de http://www.noticiasbolivianas.com/
El Presidente Evo Morales esta haciendo matar a los bolivianos con sus comunarios, así han hecho con mi esposo, lo han matado estos campesinos”, afirmó ayer Benita Butrón, esposa de Eloy Mollinedo Jaita, quien fue encontrado muerto ayer con huellas en el cuerpo de haber sido torturado.
El cuerpo fue ubicado a 35 kilómetros al Este de Oruro, camino hacia la mina de Japo. Eloy Mollinedo fue secuestrado por los comunarios de Yunguma, provincia Bolívar de Cochabamba, durante los enfrentamientos con los trabajadores de la Sociedad Minera del Centro (Somicen) que estaban explotando la mina Santa María.
Los campesinos de Yunguma se encontraban armados con fusiles, según los trabajadores que rescataron a Mollinedo, e incluso les habían advertido que si no desaparecían inmediatamente con el cuerpo también podían correr la misma suerte.
Para rescatar el cuerpo, los trabajadores se hicieron pasar por funcionarios de la Prefectura de Oruro.
Benita y sus hijos lloraban desconsoladamente anoche en la puerta de la Prefectura, y delante del cuerpo de Eloy Mollinedo, de 62 años. Los restos de Mollinedo y del otro minero también victimado por los campesinos, José Ordoñez Ramos, de 55 años, fueron velados toda la noche en la misma puerta de la Prefectura, en presencia de los mineros y los familiares.
“Yo pido justicia, Prefecto por lo menos porque somos de Llallagua salí a ver lo que han hecho esos campesinos, nosotros también somos bolivianos, cómo van a permitir que maten así a mi esposo”, dijo la viuda Benita Butrón.
Manifestó que el Presidente Morales solamente defiende a los campesinos y no a los otros sectores sociales, como a los mineros, por eso permite que maten a los mineros en Oruro, todos son bolivianos y no simplemente los campesinos.
La viuda exigió a las autoridades departamentales y nacionales justicia para su esposo, ya que no se puede matar así por así a las personas, avasallando las fuentes de trabajo de los mineros, como si ellos fueran dueños de las minas.
BÚSQUEDA
Lucio Lazo, trabajador de Somicen, manifestó que él y otras 4 personas se trasladaron a la mina de Santa María para buscar el cuerpo de Eloy Mollinedo Jaita y de otros de sus compañeros que están desaparecidos.
“Nos hemos hecho pasar como funcionarios de la Prefectura, para recuperar el cuerpo de nuestro compañero, ha sido muy difícil, porque esos comunarios nos dijeron que le saquemos rápido e incluso nos amenazaron”, señaló.
Explicó que tuvieron que buscar en todo el sector de la mina y después de varias horas de búsqueda, a las 17:00 horas fue encontrado el cuerpo sin vida y procedieron a sacarle de la zona.Lazo indicó que el traslado del cuerpo fue muy difícil, ya que no se tenía ni una frazada, por lo que tuvieron que cargarle hasta un determinado sector y posteriormente trasladarle en un vehículo hasta la puerta de la Prefectura de Oruro.
El cuerpo fue ubicado a 35 kilómetros al Este de Oruro, camino hacia la mina de Japo. Eloy Mollinedo fue secuestrado por los comunarios de Yunguma, provincia Bolívar de Cochabamba, durante los enfrentamientos con los trabajadores de la Sociedad Minera del Centro (Somicen) que estaban explotando la mina Santa María.
Los campesinos de Yunguma se encontraban armados con fusiles, según los trabajadores que rescataron a Mollinedo, e incluso les habían advertido que si no desaparecían inmediatamente con el cuerpo también podían correr la misma suerte.
Para rescatar el cuerpo, los trabajadores se hicieron pasar por funcionarios de la Prefectura de Oruro.
Benita y sus hijos lloraban desconsoladamente anoche en la puerta de la Prefectura, y delante del cuerpo de Eloy Mollinedo, de 62 años. Los restos de Mollinedo y del otro minero también victimado por los campesinos, José Ordoñez Ramos, de 55 años, fueron velados toda la noche en la misma puerta de la Prefectura, en presencia de los mineros y los familiares.
“Yo pido justicia, Prefecto por lo menos porque somos de Llallagua salí a ver lo que han hecho esos campesinos, nosotros también somos bolivianos, cómo van a permitir que maten así a mi esposo”, dijo la viuda Benita Butrón.
Manifestó que el Presidente Morales solamente defiende a los campesinos y no a los otros sectores sociales, como a los mineros, por eso permite que maten a los mineros en Oruro, todos son bolivianos y no simplemente los campesinos.
La viuda exigió a las autoridades departamentales y nacionales justicia para su esposo, ya que no se puede matar así por así a las personas, avasallando las fuentes de trabajo de los mineros, como si ellos fueran dueños de las minas.
BÚSQUEDA
Lucio Lazo, trabajador de Somicen, manifestó que él y otras 4 personas se trasladaron a la mina de Santa María para buscar el cuerpo de Eloy Mollinedo Jaita y de otros de sus compañeros que están desaparecidos.
“Nos hemos hecho pasar como funcionarios de la Prefectura, para recuperar el cuerpo de nuestro compañero, ha sido muy difícil, porque esos comunarios nos dijeron que le saquemos rápido e incluso nos amenazaron”, señaló.
Explicó que tuvieron que buscar en todo el sector de la mina y después de varias horas de búsqueda, a las 17:00 horas fue encontrado el cuerpo sin vida y procedieron a sacarle de la zona.Lazo indicó que el traslado del cuerpo fue muy difícil, ya que no se tenía ni una frazada, por lo que tuvieron que cargarle hasta un determinado sector y posteriormente trasladarle en un vehículo hasta la puerta de la Prefectura de Oruro.