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sábado, 20 de mayo de 2017

para hacer negocios, Trump les vende, ellos (los árabes) les compran armas, armas, armas en tales cantidades que asombran. los árabes 500 príncipes hacen guerras contra árabes pobres y contra el Irán, que son también musulmanes más fanáticos y que obedecen ciegamente a sus líderes que sonlos financiadores de las fuerras sucias...quién pudiera entenderlo.


Trump firma en Arabia Saudí el mayor contrato de venta de armamento de la historia estadounidense

El presidente de EE.UU., Donald Trump (izda.), junto al rey saudí, Salman bin Abdelaziz Al Saud, a su llegada al Aeropuerto Internacional de Riad, 20 de mayo de 2017. hispantv.com

Trump firma en Arabia Saudí un contrato de venta de armas de casi 100.000 millones

El presidente de EE UU emprende en Oriente Próximo su primera gira exterior ante el desafío de la expansión de Irán
La llegada de Donald y Melania Trump a Riad.
Para un presidente al que no le gustan los largos viajes y cuya campaña electoral estuvo marcada por la retórica antiislámica, aterrizar de buena mañana en Arabia Saudí no parece el mejor comienzo. Pero Donald Trump ha llegado este sábado a Riad a hacer lo único que sabe: negocios y cerrar acuerdos. A las pocas horas de llegar, ha firmado el mayor contrato de venta de armamento de la historia estadounidense por 110.000 millones de dólares (98.000 millones de euros) para modernizar el Ejército mejor dotado de Oriente Próximo, después del de Israel. En el arranque de su primera gira exterior  –en la que, además de Arabia Saudí, recorrerá sucesivamente Israel, Palestina, el Vaticano, Bélgica (sede de la UE y de la OTAN) e Italia (cumbre del G7)– el mandatario republicano se dispone a estrechar relaciones con la dinastía de los Saud, con las monarquías del Golfo y con medio centenar de países musulmanes suníes a los que enviará el domingo un mensaje de unidad frente al yihadismo y el auge político y militar del Irán chií.

Apoyado en un bastón, el rey Salman, de 81 años, recibió efusivamente a pie de escalerilla del Air Force One a la pareja presidencial. Las imágenes mostradas por el canal panárabe Al Yazira mostraron al monarca saudí estrechando la mano a Trump y a su esposa, Melania, que iba con la cabeza descubierta, al igual que ya hicieran recientemente la canciller alemana, Angela Merkel,  y la primera ministra británica, Theresa May. Trump, sin embargo, criticó a través de Twitter hace dos años a Michelle Obama por no portar el velo islámico.

Fue un recibimiento de alfombra roja oficial y gran pompa de condecoraciones escasa presencia popular, de banderas estadounidenses jalonando la ruta desde el aeropuerto por avenidas vacías, decoradas con fotos del monarca saudí y el presidente estadounidense con el lema Juntos, nosotros triunfamos.

El presidente viaja acompañado por su hija Ivanka, también con la cabeza descubierta, y su yerno Jared Kushner, a quien la prensa estadounidense atribuye un papel clave en la mediación para cerrar el contrato con las principales compañías de armamento de EE UU que será rubricado en la tarde de este sábado. También le acompañan el secretario de Estado, Rex Tillerson, y  Sean Spicer, portavoz de la Casa Blanca, entre otros altos cargos de su Administración.
Arabia Saudí ha mostrado entusiasmo en reeditar la alianza sellada con Washington tras la Segunda Guerra Mundial tras el periodo de desconfianza surgido durante el mandato de Obama, quien hace un año fue recibido con extrema frialdad en su última visita. Su Ejército —que cuenta con 227.000 militares–- fue el cuarto mayor comprador de armas mundial, con un gasto de 63.700 millones de dólares, según el Instituto Internacional de Estocolmo para la Investigación por la Paz (SIPRI, en sus siglas inglesas). La hegemonía de su Fuerza Aérea en el Golfo se basa precisamente en la superioridad de los F-15 de fabricación estadounidense, que se va a ver reforzada ahora con la adquisición de 84 F-15 SA, la versión más moderna del cazabombardero, así como de 150 helicópteros Black Hawk Apache y de sistemas de misiles.

“El contrato de material y servicios de defensa refrenda nuestro antiguo apoyo a la seguridad de Arabia Saudí y del Golfo ante las amenazas iraníes, y contribuye a incrementar la lucha antiterrorista saudí en la región para liberar la carga que recae sobre las tropas de EE UU”, destacó un portavoz estadounidense citado por la agencia France Presse. En el plano civil, Riad ha suscrito acuerdos comerciales con dos decenas de empresas norteamericanas, como Boeing o Citibank, que por primera vez podrán controlar el 100% del capital de su inversión en el país árabe. La compañía General Electrics anunció que ha cerrado contratos por importe de 15.000 millones de dólares en el marco del programa saudí de diversificación de su economía, predominantemente dependiente del petróleo.

Al margen de la consolidación de la relación bilateral con Riad, a cuyos gobernantes otorga con esta visita un papel de preeminencia en el mundo islámico —desde África hasta Asia– Trump aspira a reconstruir el domingo los puentes de EE UU con más de 1.200 millones de musulmanes de todo el planeta. Con su mensaje de mañana en la capital saudí, va a emprender un radical giro revisionista a la estrategia de su predecesor en la Casa Blanca.

El discurso de Barack Obama en El Cairo de 2009, instando a las reformas democráticas, y el acuerdo nuclear con Teherán de 2015, para intentar promover la estabilidad en la región, se van a trocar previsiblemente en un auto de fe de reconocimiento de las autocracias que rigen la vida de casi la quinta parte de la humanidad y en un amplio frente de rechazo al desafío expansionista iraní en Siria y Yemen. “Voy a hablar con los líderes de los países islámicos para instarles a combatir el odio y el extremismo e impulsar un futuro pacífico para su religión”, dijo el presidente antes de iniciar su viaje, dejando atrás el discurso político de la campaña electoral en el que planteaba vetar la entrada a EE UU a todos los musulmanes.

“Va a pedir a nuestros socios que den pasos decididos para enfrentarse al ISIS y a Al Qaeda, y a quienes perpetúan el caos y la violencia que golpea al mundo islámico y más allá”, precisó su consejero de Seguridad Nacional, Hebert Raymond McMaster. “Será un discurso que pretende unir en contra de los enemigos de todas las civilizaciones y mostrar nuestro compromiso con los aliados musulmanes”, enfatizó el exgeneral McMaster, un militar respetado por su visión intelectual y que rechaza la islamofobia.

El mensaje de la que ya ha sido bautizada como gran cumbre del mundo islámico con EE UU va dirigido ante todo a la lucha contra el yihadismo. Trump quiere dejar claro que derrotar al Estado Islámico es la prioridad máxima de su política internacional. Para ello propondrá dotar de ayuda financiera, militar y de inteligencia a las fuerzas que combatan al ISIS sobre el terreno. El Gobierno saudí inaugurará durante la vista del mandatario republicano un observatorio digital de las actividades yihadistas, con el objetivo de contrarrestar su guerra ideológica y la captación de combatientes y activistas en la Web.

Pero esa misma estrategia de cooperación tendrá el doble uso de frenar también la expansión militar de Irán y de sus milicias chiíes filiales en la región, como la libanesa de Hezbolá en la guerra de Siria (320.000 muertos, 145.000 desaparecidos, cinco millones de refugiados…), o la rebelión Huthi en Yemen (10.000 muertos, hambruna, epidemias…) respaldada por Teherán y combatida por Riad y sus aliados.

Paralelamente a estos encuentros, se celebrará un foro para la lucha contra el terrorismo y el extremismo patrocinado por la coalición militar islámica antiterrorista, creada en 2015.

En Riad, epicentro de la estricta tradición musulmana wahabí, del rigorismo religioso del que ha brotado el extremismo, la llegada de Trump y su séquito ha propiciado un inusual concierto. El cantante de country Toby Keith actuará esta noche junto al músico saudí Rabeh Sager ante una audiencia exclusivamente masculina y adulta en la capital del reino. Keith es conocido por sus letras nacionalistas, en las que alaba la misión de las tropas norteamericanas en Afganistán o Irak, y por los temas en los que glosa la bondades del alcohol en los bares del Medio Oeste que frecuenta.

miércoles, 17 de mayo de 2017

un asesinato vulgar y liso y llano que debe ser juzgado como tal. Bolivia a la cabeza de las naciones del mundo donde se mata a presuntos culpables sin que la Policía, ni la Fiscalía, ni la Justicia pueda actuar frente a brutalidad de turbas enloquecidas que actúan por mano propia. hasta cuándo?


Brutal linchamiento

Johnny Pizarro Miranda fue colgado por una turba enardecida en San Julián. Una vida más se cobra la justicia por mano propia en un país con Estado ausente, donde no cesa la violencia y reina la ley del más fuerte.

El hombre, de 38 años, había sido detenido junto con otros presuntos implicados en el asesinato de un mototaxista. Los enardecidos lograron sacar a Pizarro de la cárcel y realizar un ‘juicio sumario’ ante una jueza en la plaza de la población. No satisfechos con el fallo de facto, los enfurecidos lo golpearon, lo quemaron y, luego, lo colgaron de un palo. 

Es el retrato de territorios donde rige la ley de la selva. Donde la Policía, la Fiscalía y la Justicia estatal son arrasadas por los violentos con total impunidad y el marco de una violencia desenfrenada. El asesinato de Pizarro es apenas la punta del ovillo de un fenómeno cada vez más extendido en Bolivia. Con más de 30 linchamientos al año en promedio, el país figura en la lista de países con mayor cantidad de ajusticiados fuera de la ley, pese a las acciones del Gobierno para fortalecer a la Policía y a la Justicia. Lo grave es que en las últimas encuestas, más del 37% de los consultados respalda este brutal medio de ajusticiamiento.

Es que dichos esfuerzos parecen insuficientes cuando no se dan las señales correctas para enfrentar la crisis de la justicia, en particular por la manipulación de los procesos y la politización de todo el sistema. No es posible combatir la violencia vinculada al narcotráfico cuando se flexibilizan los frenos a la producción de coca, principal insumo de la cocaína. No es posible pedir a los policías rasos ni a los operadores de justicia que resuelvan el conflicto cuando en las cúpulas campea el favor político, la corrupción y el privilegio. No es posible combatir estos asesinatos cuando hay sectores de la sociedad permisivos a tomar la justicia en las propias manos sin dejar que actúen la Policía y la Justicia tal como debe ser en cualquier caso.

Toda persona tiene derecho a un juicio justo y, aún en caso de ser hallada culpable, la Constitución Política del Estado y la legislación boliviana no contemplan como sanción la pena de muerte en ninguna de las jurisdicciones, ni siquiera en la denominada justicia comunitaria.

Por ello, el linchamiento es un asesinato liso y llano que merece la máxima sanción. Ojalá que este caso ocurrido en San Julián no caiga, como muchos otros, en el saco de la impunidad.


lunes, 15 de mayo de 2017

al parecer por lo que refiere Los Tiempos, existiría consenso en cuanto a celebrar elecciones generales en Venezuela. eso sí, en el mínimo plazo y bajo las otras condiciones que se han planteado. la liberación de los presos políticos y rehabilitación de los opositores como candidatos. no hacerlo así, significará la continuación de la violencia, la repetición de asesinatos y encarcelamiento, la agitación en las calles y el descrédito del Regimen Chavista que está de buen tamaño.


Elecciones en Venezuela

Con cada día que pasa, cobra más importancia el apoyo internacional a un proceso pacífico de transición, al que todos los países de la región, incluido el nuestro, deberían aportar

Con el alineamiento interno e internacional tras la realización de elecciones generales, es de esperar que la cúpula militar-familiar que gobierna Venezuela, salvo que esté dispuesta a ir a una guerra civil, dé un paso al costado.

Como de alguna manera ya se había anticipado, la propuesta de que en Venezuela se convoque a elecciones generales es el único recurso que puede evitar que la violencia con la que el Gobierno responde a las diarias movilizaciones ciudadanas se convierta en abierta conflagración civil.

Tras esa propuesta se encuentran la mayoría de los países de la región, la Unión Europea y EEUU, y en los últimos días la han hecho suya el Vaticano y el expresidente de Colombia Samper quien como representante de Unasur y junto a colegas de España, Panamá y El Salvador realizaron sostenidos esfuerzos para que Gobierno y oposición alcancen un acuerdo de paz.

Con ese alineamiento es de esperar que la cúpula que gobierna Venezuela comprenda que debe dar un paso al costado y avenirse a acordar una agenda que, a corto plazo, permita la realización de elecciones libres, plurales y transparentes, de manera que sea la ciudadanía la que elija mediante el voto a quienes considere que pueden enfrentar la profunda crisis integral que atraviesa su país.

No será una tarea fácil, pues que se realicen elecciones libres implica la organización de un Consejo Electoral con personalidades que generen confianza en la gente, la liberación de los presos políticos, el levantamiento de las injustificadas inhabilitaciones a una serie de líderes de la oposición y de gremios sociales y aceptar un programa de emergencia de ayuda humanitaria a la población venezolana, fundamentalmente de alimentos y medicamentos.

Desde otro enfoque, es de esperar que el Gobierno de nuestro país revise su política de apoyo incondicional al régimen venezolano, partiendo del hecho de que es muy difícil que, a estas alturas de esa gestión, puedan tener coincidencia ideológica alguna. Quienes se aferran al poder en Venezuela han ingresado en una etapa radicalmente autoritaria, basada exclusivamente en el estamento militar y en fuerzas paramilitares cada vez más “lumpenizadas”, y con una tendencia corporativa-fascista que se traduce en su propuesta de elección de una nueva Asamblea Constituyente.

Es decir, mantener un irrestricto apoyo a este tipo de acciones y propuestas podría convertirse en un elemento de deslegitimación interna que poco bien les haría a las propias autoridades y a la propuesta política que enarbolan, pues lo único que podría ser considerado como común sería la irrefrenable ambición de perpetuarse en el goce del poder.

Pese a que, como se ha señalado en diferentes espacios de debate, es muy difícil explicar cómo el régimen venezolano se mantiene en el poder, las probabilidades de que llegue a su fin crecen día que pasa, y es probable aventurar la hipótesis de que un factor importante que lo apuntala es que su desaparición, si no se adoptan decisiones de orden internacional claras, podría generar una crisis incontrolable en algunos países del Caribe y Centroamérica, a los que Venezuela ayuda con petróleo.

Por ello, cobra más importancia aún el apoyo internacional a un proceso pacífico de transición, al que todos los países de la región, incluido el nuestro, deberían aportar.


domingo, 14 de mayo de 2017

Macron toma el poder, cuenta con un gran respaldo legislativo, aunque no exento de dificultades, sin embargo los franceses asumen con su joven presidente del nuevo Reto devolver a Francia el rol protagónico en la causa de la UE, y recuperar las banderas de una reivindicación sin extremos.


Emmanuel Macron asume las riendas de Francia: empieza la hora de la verdad

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La Francia de Emmanuel Macron quiere oler a nuevo, a estreno, a soplo de aire fresco que puede con todo. Este domingo se formalizará el traspaso de poderes: François Hollande le entregará las llaves del Elíseo, pero que el candidato de centro haya ganado las elecciones presidenciales no es suficiente para que su proyecto de renovación se ponga en marcha, como se llama el movimiento que lo ha aupado hasta lo más alto. Los franceses han votado dos veces para elegir al nuevo presidente, y tendrán que que hacerlo otra vez en breve: en junio llegan las legislativas, que serán tan determinantes que se habla de ellas como la tercera vuelta de las presidenciales. Y no es para menos.

Si Macron no mueve bien sus fichas en las próximas semanas, no conseguirá la mayoría parlamentaria que necesita para sacar adelante sus objetivos, será un líder a medias, una promesa venida a menos. La que ha sido su oponente en la carrera presidencial, Marine Le Pen, lo sabe. Todos lo saben. Por eso el día de la victoria de Macron, el 7 de mayo, empezó una carrera contrarreloj.

Ese tic tac del tiempo que corre raudo lo escucha el presidente electo, que ha dejado al mundo atónito al lograr lo que nadie había conseguido en Francia tanto por su juventud como por su inexperiencia política. Por eso se ha puesto de inmediato con las dos principales tareas de esta semana: definir su equipo de gobierno y seleccionar los candidatos que representarán a su movimiento, rebautizado como República En Marcha, en las legislativas.

Mientras lo hacía, a Macron le han salido ya varios amantes, algunos de la talla del ex primer ministro Manuel Valls. Pero es justo ahí donde está el riesgo del proyecto del presidente electo: ¿hasta qué punto le conviene sumar a sus filas nombres de partidos tradicionales? “Esa es la pregunta que nos hacemos todos. Él ha dicho que quiere diputados que provengan de la sociedad civil, parlamentarios del Partido Socialista y Los Republicanos… Pero eso tiene que estar a caballo con esa promesa de renovación de la política francesa”, asegura a El HuffPost Mathieu de Taillac, corresponsal en España del diario galo Le Figaro.

Hay que respetar las reglas a lo que hay que añadir que nosotros no tenemos una vocación de reciclaje. Tenemos vocación de construir una nueva oferta para el ciudadano.

Cómo conseguirlo es su gran reto. “Macron ha sido muy claro sobre esto: veremos representación de la sociedad civil, veremos un gobierno paritario, y veremos también rostros conocidos tanto de los socialistas como de los republicanos. Eso sí, esos rostros conocidos por la sociedad francesa habrán pasado por el mismo proceso que el resto: eso es lo que queremos dejar claro con nuestro proyecto, que busca la renovación verdadera. Eso es lo que se ha dicho sobre las intenciones del señor Valls, que ayer dijo que se presentaría a las legislativas bajo las siglas de nuestro movimiento y eso no puede ser así. Hay que respetar las reglas a lo que hay que añadir que nosotros no tenemos una vocación de reciclaje. Tenemos vocación de construir una nueva oferta para el ciudadano”, ha subrayado El HuffPost Ugo López, coordinador de ¡En Marcha! en España.

Algo así es lo que ha hecho el partido con las listas para las legislativas, presentadas el pasado jueves. El 52% de los nombres proceden de la sociedad civil, el 50% son mujeres y Valls no está… Aunque hay una maniobra para no quedar mal con él: no cumple los criterios exigidos —en concreto ya ha sido durante tres legislaturas diputado—, pero no pondrán en su circunscripción a otro candidato que compita con él como muestra de “respeto” a su labor política y al hecho de que haya dejado el Partido Socialista.

AFP/GETTY IMAGESEl secretario general de En Marcha, Richard Ferrand, indicó el pasado viernes en una entrevista al canal BFMTV que no han elegido de momento candidatos en las circunscripciones de algunas personalidades del Partido Socialista y de Los Republicanos a la espera de si deciden dejar sus partidos y sumarse a la plataforma de Macron. En referencia a los ministros salientes socialistas como Stéphane Le Foll o Marisol Touraine, ha puntualizado que, si quieren sumarse a sus listas, tendrán que abandonar su partido. En cuanto a miembros de Los Republicanos como el exministro Bruno Le Maire o el alcalde de Le Havre Edouard Philippe —susceptibles de asociarse con Macron—, señaló que les han dejado “espacios vacantes para que puedan levantar la mano” y decir que se quieren sumar a En Marcha.

Ferrand ha reconocido que “por ahora hay pocos” en la derecha que lo hayan hecho, pero también que el nombramiento del primer ministro por Macron, que se espera para el próximo lunes, “sin duda será el elemento desencadenante”.

De momento a los franceses parece gustarles lo que ha decidido su presidente electo: según un sondeo de Harris Interactive para RMC y Atlantico publicado este viernes, tres de cada cuatro franceses se muestran favorables a la lista para las legislativas presentada por el partido de Macron. Además, el 39% consideran que la formación del nuevo líder francés tiene un “buen proyecto” para las legislativas, por delante del 27% que opina lo propio de la Francia Insumisa de Jean-Luc Mélenchon, y del 24% que se inclina por Los Republicanos y el Frente Nacional. En cuanto al Partido Socialista, sólo el 17% opina que tiene un buen programa.
No creo que vaya a decantarse por ‘dinosaurios’ políticos. Macron ha sabido aprovechar perfectamente el momento político de su país
Conocidas las listas casi al completo, los nombres elegidos por Macron para conformar su gobierno serán definitivos a la hora de lanzar el mensaje sobre en qué tipo de proyecto cree, tal y como defiende el periodista Taillac: “No creo que vaya a decantarse por dinosaurios políticos. Macron ha sabido aprovechar perfectamente el momento político de su país —candidatos asolados por la corrupción, el mal momento de los socialistas…— y es consciente de que ahora no puede cometer errores. Tendrá que tener cuidado con las personas de cada bando que elige, porque se mirará con lupa. Si elige a alguien de derechas, dará bazas a los de izquierdas para la crítica y viceversa”.

LOS VOTOS DE LE PEN

Hay un dato que el presidente electo tiene que tener grabado a fuego: 11 millones, el número de votos que la candidata de extrema derecha Marine Le Pen ha conseguido. De cara a las legislativas, Le Pen ha prometido que luchará fervientemente por hacerse con la victoria. “Somos conscientes de que los votos que obtuvo Macron en la segunda vuelta no son un cheque en blanco. Sí es un rechazo muy claro a Marine Le Pen, pero nosotros logramos el resultado gracias a un buen número de papeletas procedentes del electorado de Fillon y de Mélenchon y eso no implica necesariamente un apoyo a la política y al programa de Macron. Lo tenemos claro. Ahora es turno para nuestro trabajo, para aprovechar esa dinámica a favor de Macron que se ha visto entre la primera y la segunda vuelta. Será esa la que nos lleve hasta una mayoría en las legislativas”, explica López.
Somos conscientes de que los votos que obtuvo Macron en la segunda vuelta no son un cheque en blanco
El 11 y 18 de junio será la prueba de fuego para Macron, que comprobará si es capaz o no de aglutinar de nuevo el voto que le ha llevado hasta la presidencia. Necesita lograr 289 escaños para obtener la mayoría absoluta. Si no, tendrá que negociar cada una de las propuestas o proyectos de ley con los distintos grupos parlamentarios.

El coordinador de ¡En Marcha! en España tiene claro que se harán con la mayoría, pero si no es así, también tiene una respuesta contundente: “No olvidamos que Le Pen ha conseguido 11 millones de votos: es un dato que nos pone presión para lograr resultados de manera muy rápida, para quitar la ira y odio que nutre el voto al Frente Nacional por parte de gente que se siente descalificada u olvidada por lo que se llama comúnmente la élite. Ese es nuestro primer objetivo: que descienda el número de votantes de la extrema derecha. Pero si no lo conseguimos, si nos hacemos con una mayoría relativa, tenemos claro que somos los únicos capaces de construir mayorías de proyectos tanto a nuestra izquierda como a nuestra derecha”.

De momento, este domingo Francia consuma su cambio con el traspaso de poderes entre Hollande y Macron. El presidente socialista se retira, deja la presidencia sin haber optado a revalidarla, algo inédito en la historia del país. Como anómalo es también todo el éxito que rodea al líder de ¡En Marcha!. Empieza la cuenta atrás para saber si se queda en algo que pudo ser o por el contrario el líder que tanto ansían los franceses, tanto para dirigir el país como para unirlos. Porque ese es, al fin y al cabo, el gran reto de Emmanuel Macron.