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viernes, 6 de agosto de 2010

Publicado en El Deber el texto del Gobernador Costas

Hoy nos congregamos, aquí en la tierra sin mal, para celebrar los 185 años de la Fundación de la República de Bolivia, para celebrar 185 años de un proyecto común de nación que se inicia aquel 6 de agosto de 1825, en el cual los representantes de las llamadas republiquetas que habían luchado por la independencia, decidieron conformar una República soberana.

Una patria que vio a Sucre como el lugar de su nacimiento y que rescatamos por ser símbolo de nuestra historia común.

Si, en esta ocasión, este 6 de agosto, Bolivia, lo celebra en Santa Cruz, es sólo circunstancial. Nuestros corazones están en la tierra que vio nacer a la patria y que dio su sangre para sostener la República una y otra vez.

La Bolivia que nació en Sucre crecerá como quisieron nuestros próceres, será una República de justicia y de libertad.

Esto es algo que nunca debemos olvidar. La República, es la base fundacional del pacto de unidad nacional que todos los bolivianos y bolivianas debemos honrar, respetar y defender.

La República no es solo un nombre o una forma de denominar a los países. Es la relación orgánica entre el pueblo y su Estado.

Es una forma de organizarse en sociedad, de convivir en el marco de una nación, sobre el fundamento de principios y valores universales como la libertad, la democracia, el pluralismo, la justicia y la igualdad de todos los ciudadanos frente a la Ley.

La República garantiza la unidad y respeta la diversidad. En ella, el pueblo es el soberano y las autoridades están al servicio del pueblo.

La República se sostiene en la distribución equilibrada del poder. Toda Constitución republicana prohíbe la concentración del poder como principio universal de la democracia.

¿Para qué sirven todos estos principios, estas instituciones democráticas, estos pesos y contrapesos, estos equilibrios entre quienes gobiernan y los gobernados?

Para un solo fin: evitar el monopolio del poder y asegurar el respeto a los derechos humanos.

Por eso, quienes pretenden acabar con la República, en realidad atentan contra el principio de la unidad nacional, porque ahí nos unimos.

Aquellos políticos e intelectuales que propugnan su fin, sólo buscan el poder total y pretenden imponer el pensamiento único.

Pero están históricamente equivocados. Así, con imposiciones e intolerancias no se hace patria ni se logra la unidad.

Ocuparse de fomentar el odio y caer en la irracionalidad de llegar al extremo de entrenar militarmente a civiles para guerras contra enemigos inexistentes, No nos llevara a ninguna parte, salvo a una espiral de confrontación donde nadie saldrá victorioso.

Necesitamos paz y unidad, no guerra ni más división,

Necesitamos libertad y democracia por el bien común,

Necesitamos tolerancia, diálogo y consenso.

Necesitamos, justicia, inclusión y respeto a los derechos de cada persona,

Necesitamos oportunidades y progreso.

Y como somos sinceros y abiertos, tenemos que decir que a pesar de los 185 años transcurridos, no estamos contentos con el país que heredamos ni con el que hoy tenemos.

¿Cómo podríamos estarlo, en medio de tanta pobreza, injusticia, exclusión y atraso?

El compromiso con nuestra patria boliviana nos exige trabajar y luchar por una Bolivia diferente, que se integre día a día en el anhelo común por el bienestar de todos sus hijos.

Una Bolivia, en la que reconozcamos nuestras diferencias y aceptemos nuestra diversidad, la riqueza de nuestros pueblos y raíces indígenas, la maravilla fecunda de nuestro mestizaje.

En este día tan especial y con todo respeto y amor fraternal, le queremos hablar a nuestras hermanas y hermanos bolivianos.

La Bolivia del futuro, de la unidad y de la prosperidad para cada familia, es la Bolivia de las Autonomías.

Esa es la Bolivia que estamos construyendo en este Departamento Autónomo de Santa Cruz, con todos los hermanos bolivianos que decidieron venir, desde los cuatro puntos cardinales del territorio nacional, encontrando aquí la solidaridad, el amor, el respeto y las oportunidades que tanto buscaban.

Lo diremos y repetiremos siempre: todos quienes vienen a estos llanos orientales para trabajar, producir y progresar, son bienvenidos y serán recibidos por el abrazo integrador del pueblo cruceño.

Y serán cruceños y serán bolivianos porque ambos sentimientos son uno solo, así lo sentimos y así lo vivimos.

Hace poco más de un año celebramos en Sucre el bicentenario del primer grito libertario de América.

Lamentablemente, llegamos a esa fecha con una patria que no es todavía la que nos merecemos ni merecen nuestras hijas y nuestros hijos.

Confrontados, divididos, en algunos casos perseguidos, no podemos estar contentos con la realidad que hoy vivimos.

Peor aún, con la mayor parte de la población sumergida en la pobreza y el atraso, verdadera y real exclusión que oprime a millones de compatriotas.

Por eso, desde Santa Cruz, desde esta Gobernación, queremos proponerle a toda Bolivia, que nos tracemos un objetivo común para el Bicentenario de la fundación de la República de Bolivia, que festejemos todos juntos ese seis de agosto del 2025.

Que logremos una Bolivia, unida, justa, incluyente, moderna y progresista.

Que construyamos una democracia, en la cual todos nos sintamos respetados, incluidos e integrados.

Esa es la Bolivia Autonómica, que debemos construir para todos y con la participación de todos.

Autonomía que tiene como fin el progreso para cada departamento, para cada rincón patrio, para regiones como Potosí que merecen beneficiarse de sus recursos naturales para impulsar su desarrollo

Autonomía que tiene como principal motivo que administremos con transparencia y eficiencia los recursos del pueblo, para que cada familia, barrio, comunidad, pueblo y ciudad de Bolivia, tenga las condiciones de vida digna, que con justa razón hoy nos reclaman esos millones de bolivianos que aún sufren la pobreza.

Ese Gran Acuerdo por el Bicentenario de la República, es el que postulamos y trabajaremos para lograr con el consenso y la participación de todos los bolivianos.

Que no nos encuentre la historia una vez más como nos encontró el inicio de este siglo XXI, como nos encontró el bicentenario del primer grito libertario de América, y como No hubiéramos querido estar hoy.

Hasta el Bicentenario de la Republica, tenemos quince años para trabajar por Bolivia, por los más necesitados, por los más débiles, por nuestros pueblos indígenas, por los niños y por las mujeres.

Ese es el mejor honor que podemos brindar a nuestra amada tricolor, esa rojo, amarillo y verde, en la cual todos nos encontramos y sentimos representados.

Ese es el camino que debemos seguir en este siglo XXI.

Esa es la ruta hacia el futuro con el que sueñan cada boliviana y boliviano.

Ese es el futuro que debimos pero no pudimos dar hoy a quienes se fueron a otras naciones a buscar oportunidades.

Aprendamos del pasado. Reconozcamos los errores y las injusticias.

No los reiteremos ni caigamos de nuevo atrapados en las mismas miserias.

Ni retrocedamos hacia el pasado ni nos estanquemos en el presente.

Construyamos el futuro juntos.

Esa construcción, la de una Bolivia moderna es imparable, está teñida irremediablemente por los sueños de Santa Cruz, por ese cambio que hemos propuesto para toda Bolivia.

Nuestra revolución, la revolución del Patujú, es la expresión de nuestros mejores anhelos.

Esta revolución del Patujú tiene en la autonomía departamental, en ese sueño que Santa Cruz está conquistando día a día, uno de sus mejores instrumentos para hacer una sociedad mejor y más justa.

Lo hemos demostrado con la distribución de los recursos a los lugares donde más se necesitan.

Aún falta mucho por hacer en toda Bolivia y a veces el desafío parece demasiado grande y plagado de dificultades.

Sin embargo, la sonrisa y la alegría de nuestros niños, de nuestros ancianos y de quienes mas necesitan de nuestro apoyo, será la mejor recompensa que podamos recibir y el mejor homenaje que podamos brindar a nuestra amada República de Bolivia.

Que Dios bendiga a Santa Cruz,

Que Dios bendiga a Bolivia.

Muchas gracias,

jueves, 5 de agosto de 2010

preocuación por la Reforma Urbana
nadie podrá tener más de 500 metros de propiedad

(segmento de un artículo de Los Tiempos en Puntos de Vista)

Ahora estamos ante lo mismo y es tiempo de impedirlo nuevamente. El Viceministerio de Vivienda y Urbanismo, dependiente del Ministerio de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, elaboró un proyecto de ley en 76 artículos para regular las propiedades urbanas. Lo gravísimo de este proyecto de ley es lo que establece en su artículo séptimo (art. 7°) para los lotes urbanos que exceden de quinientos metros cuadrados de superficie: “si se presentan casos excedentes a la superficie mencionada (500 m2), el GAM (una repartición estatal) expropiará estas áreas que serán utilizadas con fines habitacionales o fines de equipamiento según la superficie excedente”.

Por favor, amable lector, relea lo que está en negrillas, haciendo omisión de la deficiente sintaxis. Si alguien, como muchísimos, tiene un lote, que puede estar construido, que excede de 500 metros cuadrados, pues el excedente será expropiado ateniéndose a la ley. ¿Qué pasa con las casas, con los edificios, con los colegios, con las fábricas? Pregunten al multifolclorismo, porque el proyecto de ley no es nada claro.

En el artículo sexto de este proyecto de ley se afirma que “expropiación” es el “efecto judicial de hacerse cargo de una propiedad privada por motivos de utilidad o necesidad pública”. De modo que con este proyecto de ley, una repartición estatal se hará cargo de los bienes privados sin más declaración de necesidad pública que lo dicho por la misma ley: que no se podría poseer más de quinientos metros. Y punto. Qué se haría con el terreno, eso es un misterio, pero ciertamente todo será arbitrario.

miércoles, 4 de agosto de 2010

gremialistas hacen de todo:
claman de rodillas a Evo. queman muñecos de Evo. cuelgan a Evo.

Miles de gremialistas comenzaron el lunes en La Paz las movilizaciones en rechazó al proyecto de Ley de Aduanas, que endurece las penas y autoriza la confiscación de vehículos e inmuebles en casos de contrabando.
Unos cinco mil comerciantes de la “Superferia de Oruro” y otros de la “Eloy Salmón” de La Paz cercaron durante ocho horas los accesos a la Plaza Murillo y colapsaron el tráfico vehicular en la sede de Gobierno, según la gubernamental agencia ABI.
Jesús Cahuana, máximo dirigente del sector en Santa Cruz y segundo hombre de la Confederación de Gremiales de Bolivia, anunció que el próximo lunes la movilización será a nivel nacional y esperan la participación de los 1,5 millones de afiliados.
Ese día de 9.00 a 15.00 cerrarán los mercados de la capital cruceña y bloquearán los accesos de todas las carreteras de salida al interior del país. En el departamento hay 80 mil gremialistas.
Si el Gobierno no acepta incluir una representación gremial en la comisión que discute la reforma en la Cámara de Diputados; el jueves 12 iniciarán una marcha desde Oruro hasta La Paz.
Los puntos polémicos
El vicepresidente del Estado, Alvaro García Linera, ratificó que la ley se aprobará sin cambios y aseguró que la norma no afecta a los comerciantes minoristas, sino que ataca a una “red de contrabandistas”, a los que acusó de estar atizando las movilizaciones.
Los comerciantes alegan que la futura norma no discrimina al comercio legal e ilegal, lo que puede derivar en la confiscación de inmuebles usados como depósitos o vehículos utilizados para su transporte.
Cahuana agrega que deroga un decreto del Gobierno de Hugo Banzer que establecía el control de la mercancía sólo en trancas fronterizas, aeropuertos y embarcaciones.
El proyecto establece penas de cárcel de 5 a 10 años para los infractores y de 4 a 8 años en casos de defraudación aduanera. Además, los funcionarios públicos implicados en contrabando podrían ir presos hasta 13 años. Se eliminan las medidas sustitutivas en casos de detención preventiva.
La que ha sido calificada como “Ley 1.008” contra el contrabando fue aprobada en grande en la Comisión de Planificación de Diputados y se espera que sea considerada desde hoy en detalle.

martes, 3 de agosto de 2010


la prensa está repleta de detalles sobre el bochornoso incidente del masista Fidel Surco. el choque de su vehículo que conducía ebrio contra otro. su detención preventiva. su sueño para recuperarse de la borrachera, su intento de huir del escenario del delito y la repercusión. se pide su destitución.

Marco Chuquimia. La Paz

Fidel Surco, senador del MAS y presidente del Consejo Nacional del Cambio (Conalcam), protagonizó ayer en El Alto un hecho de tránsito en estado de ebriedad. Su posterior detención en la repartición de Tránsito en dicha ciudad no fue la usual, lo que provocó la protesta de las personas que realizaban trámites en esas oficinas.


El primer hecho inusual fue la forma en la que fue aprehendido. Los vecinos de la avenida Julio César Valdez, de la zona del Alto de la Alianza, relataron que el accidente se produjo entre las 10:30 y las 11:00, y que tanto el senador como su acompañante trataron de darse a la fuga cuando apareció un patrullero del 110. “Al parecer, el senador no escuchó al uniformado y trató de escapar, pero fue rodeado por los vecinos”, relató Ruth Mendoza, cuya casa está a unos 50 metros de donde Surco chocó.


El dirigente oficialista fue introducido en la patrulla por la fuerza y cuando llegó a las oficinas de Tránsito no fue recluido en una celda, como ocurre con todos los ciudadanos. Los uniformados le prestaron una oficina para que ‘descanse’.


Martín de la Quintana, abogado del masista, afirmó que se investigarán las circunstancias y se establecerá quién manejaba la vagoneta Toyota 4Runner 2007 color champán. Los testigos aseguran que era Surco el que conducía. Chocó contra una vagoneta Suzuki, conducida por Édgar Gustavo Pérez, un oficial de la Fuerza Aérea.


Otro detalle inusual es que los policías y el fiscal José Fernando Villarroel no realizaron la prueba de alcoholemia apenas ingresó Surco a las oficinas de Tránsito, como sucede con cualquier infractor. Los funcionarios dejaron que Surco descanse, entre las 11:00 y 18:05.
El secretario de relaciones del sindicato de transportes Larecaja, Wilfredo Arias Mercado, protestó por la demora del examen y dijo que cuando ellos son apresados, lo primero que se hace es la prueba de alcoholemia, por más que no tengan tufo alcohólico. “Con nosotros no esperan a que llegue nuestro abogado, a carajazo limpio nos hacen soplar el globito”, graficó el dirigente. Similares conceptos expresaron otros seis choferes.


El fiscal, en horas de la tarde, incluso mencionó que pese al tiempo transcurrido, no había recibido el informe del policía investigador y sólo señaló que la ‘víctima’ no quiso presentar cargos, ‘por el momento’.


Cuatro policías que trabajan en estas dependencias afirmaron, por separado, que Surco ya tiene antecedentes de haber conducido en estado de ebriedad en febrero de este año y que esa vez fue sorprendido en las inmediaciones de la carretera a Oruro. Aclararon también que no se puede decir que fue un accidente, sino un hecho de tránsito, ya que Surco conducía ebrio y eso es un delito, no un accidente. Sin embargo, el comandante de Tránsito, coronel Freddy Soruco, indicó desconocer ese antecedente y prometió investigarlo, pero confirmó que, cuando se le hizo la alcoholemia, Surco tenía 1,5 de grado alcohólico y, por lo tanto, estaba borracho.


A las 18:35, el senador terminó de declarar ante el fiscal y, a través de su abogado, admitió que estaba ebrio en el momento del accidente, pero se negó a confirmar si estaba conduciendo el vehículo. De la Quintana señaló que ese hecho deberá ser investigado por la Fiscalía.

En detalle

- Mientras el fiscal esperaba la llegada del abogado de Surco, éste estaba recostado en un colchón y realizaba llamadas telefónicas todo el tiempo. Lo rodeaban cuatro personas y un policía hacía guardia en la puerta.

- Al menos ocho colaboradores de Surco ‘corretearon’ toda la tarde entre la oficina del fiscal y el cuarto donde descansaba el senador. Se enfrentaron con los periodistas para evitar que se fotografíe al infractor.

- La Policía organizó un operativo para sacar a Surco de esa oficina. Pusieron un auto en una puerta alternativa y cuando los periodistas
corrieron al vehículo, el parlamentario fue sacado por la puerta principal apresuradamente.

- El fiscal José Fernando Villarroel adelantó que enviará sangre del senador a los laboratorios del Instituto de Investigaciones Forenses para tener certeza de la cantidad de alcohol que tenía el legislador en su sangre.

El Gobierno lo deja en manos del fiscal
“El estado de ebriedad en el que conducía el senador Fidel Surco constituye un delito que está tipificado en el Código de Procedimiento Penal y fija como sanción de seis meses a dos años de reclusión”, explicó el viceministro de Gobierno, Marcos Farfán, y añadió que ahora corresponde al fiscal investigar todas las circunstancias del hecho. Según el informe del fiscal José Fernando Villarroel, Surco tenía 1,5 grados de alcohol, detectado en el test de alcoholemia. Los policías explicaron que cuando una persona tiene 0,7 ya es considerada como ebria.
Los masistas evadieron las respuestas y afirmaron que si se encuentra delito, es necesario que sea sancionado. La senadora Mirtha da Costa (MAS) dijo que el tema no se ha analizado. Su colega Carlos Aparicio aseguró que el MAS cuenta con instancias que sancionan el hecho de conducir en estado de ebriedad. “Si es que el senador estuvo manejando el vehículo en el que se trasportaba, las sanciones van a ser drásticas", adelantó.
El diputado Javier Zabaleta (MSM) afirmó ninguna de las dos cámaras legislativas tiene un reglamento de ética y menos una comisión, lo que impide una sanción interna. “Lo que queda es que, por ética, él pida licencia”, señaló.
La diputada Elizabeth Reyes (UN) calificó de ‘grave’ el suceso y recordó que cuando ocurrió lo mismo con el candidato oficialista a gobernador Félix Patzi, el Presidente no dudó en echarlo. Reyes pidió que se actúe de igual modo ahora. El 28 de julio, Surco ya fue expulsado de la dirigencia del MAS en La Paz y sus compañeros de la Federación de Colonizadores anunciaron que harán lo mismo porque consideran a Surco como el responsable de la represión de Caranavi, donde murieron dos campesinos.