Evalúan Alalay para sede de estquí náutico en 2018
El director del Comité Organizador de los XI Juegos Suramericanos, Marcelo Ortubé, indicó que la Alcaldía de Cochabamba ofreció la laguna Alalay para que sea sede de la prueba de esquí acuático en los juegos que se realizarán en Cochabamba del 9 al 20 de mayo de 2018.
“Junto con el municipio vamos a hacer el análisis y los estudios del agua y la profundidad para ver si las condiciones para la disciplina son las adecuadas”, señaló Ortubé.
Por su parte, el director de Medio Ambiente de la Alcaldía, Elvis Gutiérrez, señaló desconocer el tema. Este medio intentó comunicarse con el secretario de Planificación del municipio, Manuel Prado, y el jefe de los Juegos Suramericanos 2018, Sergio López, sin éxito.
La responsable de la Unidad de Limnología y Recursos Acuáticos (ULRA) de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), Dylian Castellón, señaló que en las condiciones en las que se encuentra la laguna, un proyecto de este tipo es inviable. “En estas condiciones es imposible, es peligroso para la gente misma”, dijo.
La investigadora explicó que el impacto de un juego de este tipo sería perturbante para la biodiversidad de este ecosistema “por el uso de motores. Si este deporte se hace con esos implementos y demás, generaría contaminación para los organismos”, indicó.
Los estudios realizados en el embalse durante la pasada gestión revelaron la presencia de tres especies de cianobacterias consideradas tóxicas en las aguas de Alalay. Según el ecólogo que realizó este estudio, Eduardo Morales, las bacterias generan hepatotoxinas y neurotoxinas y son letales para aves, peces y humanos, e ingresan al cuerpo por contacto directo con las mucosas. Estas cianobacterias causaron la mortandad de miles de peces en marzo del año pasado.
El Circuito Bolivia, avenida por la que circulan vehículos alrededor de Alalay, también será escenario deportivo de la prueba ciclística contrarreloj para los Juegos Suramericanos, por lo que el lado norte de la vía fue ampliada de siete a 12,8 metros, en abril. La obra se realizó sin ficha ambiental.
Prado refirió, la semana pasada, que para la ampliación o consolidación del Circuito Bolivia se tiene planificado igualar el lado este, o sea, dar el mismo perfil que el lado norte. “Pero para este trabajo vamos a desarrollar términos del proyecto, es decir, tramitar la licencia ambiental”, precisó.
Señaló que para los Juegos Suramericanos se debe mejorar la capa de rodadura del asfalto, “todas las irregularidades tienen que mejorarse pero lo estamos pensando con tiempo, no lo vamos a hacer todavía”, aseguró.
Los vecinos de la zona piden que este mismo proyecto se realice en todo el entorno y anunciaron tomar medidas de presión.
BIODIVERSIDAD
La laguna Alalay constituye un ecosistema de vida para 35 especies de aves acuáticas, según un censo del 2016. Desde principios de esta gestión se pudo distinguir la vuelta de varias especies a este embalse, entre ellas las garzas y gaviotas.
En los monitoreos de esta gestión no se encontraron peces; antes del episodio de mortandad masiva se tenían al menos cinco especies: platincho, pejerrey, carpa, zapato y gambusia.
“Junto con el municipio vamos a hacer el análisis y los estudios del agua y la profundidad para ver si las condiciones para la disciplina son las adecuadas”, señaló Ortubé.
Por su parte, el director de Medio Ambiente de la Alcaldía, Elvis Gutiérrez, señaló desconocer el tema. Este medio intentó comunicarse con el secretario de Planificación del municipio, Manuel Prado, y el jefe de los Juegos Suramericanos 2018, Sergio López, sin éxito.
La responsable de la Unidad de Limnología y Recursos Acuáticos (ULRA) de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), Dylian Castellón, señaló que en las condiciones en las que se encuentra la laguna, un proyecto de este tipo es inviable. “En estas condiciones es imposible, es peligroso para la gente misma”, dijo.
La investigadora explicó que el impacto de un juego de este tipo sería perturbante para la biodiversidad de este ecosistema “por el uso de motores. Si este deporte se hace con esos implementos y demás, generaría contaminación para los organismos”, indicó.
Los estudios realizados en el embalse durante la pasada gestión revelaron la presencia de tres especies de cianobacterias consideradas tóxicas en las aguas de Alalay. Según el ecólogo que realizó este estudio, Eduardo Morales, las bacterias generan hepatotoxinas y neurotoxinas y son letales para aves, peces y humanos, e ingresan al cuerpo por contacto directo con las mucosas. Estas cianobacterias causaron la mortandad de miles de peces en marzo del año pasado.
El Circuito Bolivia, avenida por la que circulan vehículos alrededor de Alalay, también será escenario deportivo de la prueba ciclística contrarreloj para los Juegos Suramericanos, por lo que el lado norte de la vía fue ampliada de siete a 12,8 metros, en abril. La obra se realizó sin ficha ambiental.
Prado refirió, la semana pasada, que para la ampliación o consolidación del Circuito Bolivia se tiene planificado igualar el lado este, o sea, dar el mismo perfil que el lado norte. “Pero para este trabajo vamos a desarrollar términos del proyecto, es decir, tramitar la licencia ambiental”, precisó.
Señaló que para los Juegos Suramericanos se debe mejorar la capa de rodadura del asfalto, “todas las irregularidades tienen que mejorarse pero lo estamos pensando con tiempo, no lo vamos a hacer todavía”, aseguró.
Los vecinos de la zona piden que este mismo proyecto se realice en todo el entorno y anunciaron tomar medidas de presión.
BIODIVERSIDAD
La laguna Alalay constituye un ecosistema de vida para 35 especies de aves acuáticas, según un censo del 2016. Desde principios de esta gestión se pudo distinguir la vuelta de varias especies a este embalse, entre ellas las garzas y gaviotas.
En los monitoreos de esta gestión no se encontraron peces; antes del episodio de mortandad masiva se tenían al menos cinco especies: platincho, pejerrey, carpa, zapato y gambusia.
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